Los SINCOPAS (1968–1970)
Grupo formado en 1968 en la ciudad de Sax por: Francisco Gil Deltell, cantante; José Barceló Bernabé, trompeta y contrabajo eléctrico; José Díaz Barceló (Sax 10-6-1944), saxo; Antonio Lucas Herrero, trompeta; Juan López Chico, saxo; y Andrés Barceló Gil, en la batería.
Ilusionados, comienzan a ensayar los lunes y miércoles en la casa de campo de Juan López (salida de Sax por el puente de “Las cuatro rosas”, frente al mesón El Almendros). Ensayarían allí durante aproximadamente ocho meses, trasladándose después definitivamente a un local de la calle Yecla (junto al actual Local Social de la Sociedad Instructiva Musical “Sones de Sax”).
Su primera actuación tuvo lugar en la piscina de Yecla, en el mes de julio de 1968, siendo muchas las poblaciones y actuaciones que Los Síncopas recuerdan, destacando las de El Parador de la Nit en Játiva, todos los fines de semana de agosto de 1968 y 1969, las del jardín El Verdoso en Fuente La Higuera, donde realizaban varias actuaciones en primavera y verano, las del local El Picola de Caudete, las de los sábados por la noche en La Ponderosa de Villena, que por aquel entonces era un restaurante de carretera, las del local Las Vegas en Yecla, y otras realizadas en Hellín, Alcira, Ibi, Elda y Monóvar. Y como no podía ser de otro modo, en Sax realizaron también diversas actuaciones en El Frontón (cine de verano en la calle Carrera), en el casino Los Santos, en el Teatro Cervantes y en el Local de la Música, en la calle Castelar.
En el apartado de bajas e incorporaciones, cabe señalar que a principios de 1969 se incorpora Andrés Juan Mataix, que comenzará tocando el bajo y acabará siendo el organista del conjunto tras recibir clases del maestro Villar.
Con su incorporación, Juan López Chico dejó de participar tanto como músico y lo hizo más como representante. En septiembre del mismo año, José Barceló Bernabé marcha a cumplir el servicio militar y se incorpora Pablo Murcia Mazón, durante la que será la última temporada del grupo.
Su repertorio estaba formado por temas de la época, desde Los Beatles hasta Miguel Ríos, pasando por Lone Star, Dani Daniel, Al Bano, Dúo Dinámico, Formula V o Gilbert Becaud, no faltando temas como “Mi calle”, “Vuelvo a Granada”, “Por qué te vas”, “Cuéntame”, “Samantha” o el obligado “Soulfinger” de The Bar-Kays, con el que abrían y cerraban sus actuaciones.
Los ingresos percibidos durante su corta vida musical la destinaron a pagar sus instrumentos.
Por el agotamiento característico en este tipo de agrupaciones (donde hay que buscar más horas al día para los ensayos, las actuaciones y, claro está, para el propio puesto de trabajo), así como por discrepancias entre algunos miembros del grupo, a principios de 1970, se disuelven.
Tras su última actuación, en Benajama, descargan los instrumentos en “Casa de Cirilo” (calle San José, 10), para devolverlos a la empresa cuando estaban a punto de amortizarlos.
Cada uno seguiría su camino.