Los ZINGAROS (1969-1997)
Conjunto formado en Enguera en 1969, por: Pepín García “Coca”, cantante; Jesús Gómez “Pau”, guitarra; Roberto Belda, guitarra baja; Manuel Vidal "Manolo", órgano y saxo; y Vicente Barberán “Gasparo”, batería.
A partir de su formación el grupo fue convirtiéndose poco a poco en un referente teniendo cita obligatoria en la práctica totalidad de fiestas y eventos culturales de Enguera y del resto de pueblos de su entorno.
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El 6 de septiembre de 1971 actúan en las fiestas Cívicas y Religiosas celebradas en Villanueva de Castellón.
Con la incorporación de Constantino Simón “Tino” (Enguera), como trompeta, añadieron brillantez y espectacularidad a sus actuaciones.
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Años más tarde llegaría el momento del relevo para algunos de sus miembros. Pepín, Vicente, Roberto y más tarde Jesús, dejarían paso a: Francisco Giner Mas "Paco Dorre" (Bolbaite 19-8-1954), cantante; Pedro Juan Gómez García “Pere” (e.p.d.), guitarra baja; Rafael Simón Sáez “Boti”, batería; y Alfredo Barberán Barberán (Enguera 15-7-1954), guitarra, hasta ese momento integrantes de otro grupo musical enguerino: Símbolo, dándole un nuevo aire personal e innovador a sus actuaciones y alcanzando el reconocible sonido de la nueva orquesta Zíngaros.
Cientos de canciones jalonaron las listas del repertorio de la orquesta, verbena tras verbena, temporada tras temporada, interpretaron música para todos los gustos y para todo tipo de público.
Motivos profesionales llevaron a Tino a abandonar las filas de la orquesta, lo que les obligó a buscar un relevo para el puesto de trompeta. También el lugar de bajista quedó libre, ocupando el puesto el hoy compositor Juan Francisco Tortosa Esteve (Enguera). También se incluyó en la plantilla un nuevo pianista, Juan Enrique Taverner Palop (Enguera 26-12-1960), que fue integrante de la orquesta en dos periodos de su historia, entre los cuales hay que recordar al también pianista de Canals Juan “El Pastisser”.
La vacante de trompeta fue ocupada por Juan Francisco Tortosa Carbonell, quien con tan solo 16 años tuvo la difícil empresa de sustituir a Tino.
Rafael Simón “Boti” cedió el relevo a Jaime Simón “Alegre” quien tras un breve paso por la orquesta preparó concienzudamente a su hermano Rafael Simón “Alegre” (28-12-1972) para ocupar el puesto de batería.
También Paco Giner abandona la formación tras muchos años de ser la voz solista del grupo. En su lugar se incorpora el cantante de Alcudia de Crespins, José A.
Un momento importantísimo en la jalonada trayectoria de la orquesta fue la incorporación de la primera mujer cantante, Reme Baldoví Perales (Bolbaite 6-4-1969), quien posibilitó la incorporación de muchísimas canciones al repertorio que hasta entonces había sido complicado interpretar.
A partir de ese momento, la presencia de la mujer en la orquesta sería ya imprescindible. A Reme le sucedió Nieves González Durán (Madrid 2-9-19¿?). El puesto de bajista fue ocupado por varios intérpretes en poco tiempo: Manuel Tortosa, Manuel Pérez, César Giner, Nacho S, y Teo Aparicio Barberán. Un par de años más tarde, éste último cambio la guitarra baja por el saxofón.
Se renovaban una vez más las voces. Joan Linares (22-9-1968) y Maruska (Valencia 1-7-1974) serían, desde ese momento, las voces principales del conjunto. Se alcanzaba con ellos el punto más álgido en cuanto a nivel artístico se refiere.
Sin duda, una de las noches más agridulces e inolvidables que pudieron vivir los miembros de esta gran familia fue la despedida del maestro Vidal. A los teclados, al acordeón, al clarinete y por supuesto, a los saxofones, este gran maestro les había regalado más de treinta años de dedicación y buen hacer.
Otros integrantes de Zíngaros a partir de ese momento serían: Daniel Perucho, saxofón; Julián Aparicio Calatayud, guitarra baja; Javier Gallego, teclados; y Marcos Carbonell (Bolbaite), saxofón.
Y así, año tras año, verbena tras verbena, esta gran familia de músicos se retira de los escenarios en 1997.
NUEVO SIGLO:
El año 2019 era un año de obligada cita para todos los que de un modo u otro pertenecieron a la decana de las orquestas enguerinas. Y es que 50 años del inicio de esta fantástica aventura merecía un recuerdo especial. José María Simón, al frente de su programa de tertulia en Enguera TV, tuvo la gentileza de invitar a cuantos componentes de la orquesta tuvieron a bien participar en su programa. Recuerdos entrañables, divertidas anécdotas y música, mucha música permitieron viajar a los televidentes varias décadas atrás.
A raíz de esta entrevista en Enguera TV y animados por José María Simón se propuso a los músicos de Zíngaros grabar algunas canciones para el programa y que aquellos enguerinos que no tuvieron la ocasión de disfrutar de aquellas canciones tuvieran la ocasión de hacerlo. Ni que decir tiene que inicialmente aquello era un utópico sueño (teniendo en cuenta que estaban más de 20 años sin tocar juntos). Tras una reunión inicial y, a pesar de que el reto era casi un imposible, aceptaron la propuesta. Largo y dificultoso fue el camino, pues hubo que contactar con muchos de sus integrantes que vivían lejos, hacer una selección de las canciones y confeccionar de nuevo todos los arreglos y partituras. Y llegó el primer ensayo, Rafa “Alegre” marcaba la entrada con sus baquetas y ... estaban sonando como antes de ayer. No hace falta decir que sonidos, sonrisas y lágrimas de emoción se entremezclaron cuando comenzaron a ensayar las primeras canciones.
El proyecto inicial de grabar 4 o 5 canciones fue creciendo hasta 22 y la sencilla grabación sin demasiadas pretensiones fue sustituida por una "Gala de 50 Aniversario con mayúsculas". Los ensayos se fueron sucediendo uno tras otro y la calidad de las interpretaciones fue aumentando del mismo modo que crecía la ilusión y la magia alrededor de este gran concierto. Las galas (hubo que realizar dos para dar cabida a todo el público que deseara asistir) se celebraron con motivos benéficos los días 12 y 13 de abril de 2019 en la Casa de la Cultura y en ellas se hizo un recorrido, además de grandes éxitos musicales de las últimas cinco décadas, a la historia reciente de Enguera teniendo un especial recuerdo para todos aquellos Zíngaros que ya no están entre nosotros.
Los músicos y el público se fundieron los dos días en una perfecta simbiosis permitiendo que fluyera la magia como sólo sucede en pocas ocasiones en la vida. Ni en el más maravilloso de los sueños esta gran familia, que fue la Orquesta Zíngaros, podría imaginar poder celebrar su 50 Aniversario ofreciendo de nuevo lo que mejor saben hacer: música.